Traer un bebé al mundo puede suponer un montón de presión sobre el cuerpo y la mente de una mujer. Los nervios, el desarrollo del bebé en tu barriguita, los planes, y el trabajo y, por supuesto, el «¿recuperaré mi figura?»
Tener un vientre liso y firme después del parto es el objetivo de muchas mamás después de dar a luz. Sin embargo, a veces parece que esto sólo está al alcance de las celebrities. El período postparto, que dura por lo general de 6 a 8 semanas, implica pasar por muchos estados, tanto emocional como físicamente, es un momento de cambio hormonal y un ajuste emocional. Aprender a lidiar con todos estos cambios será necesario para convertirte en mamá, primeriza o no.
Con todo lo que implica la llegada del recién nacido a casa es posible que te hayas olvidado de cuidar a otra persona tan importante como el pequeño… ¡tú misma! Tu nuevo rol de madre es inmensamente gratificante a la vez que estresante, por eso, ahora más que nunca, tienes que alimentarte bien para poder cuidar de tu bebé.
El embarazo cambia el cuerpo de mil maneras y no se detiene cuando nace el bebé a no ser que pongas de tu parte y dediques tiempo a cuidar de ti misma. Principalmente, lo que vas a necesitar es mucho descanso, una buena alimentación, ejercicio y apoyo.
Los médicos no recomiendan hacer una dieta de adelgazamiento en las semanas posteriores al parto, ni tampoco durante los primeros seis meses de lactancia exclusiva del bebé.
Entre los seis meses y el primer año después del parto es el momento ideal para recuperar la figura después del parto.
A estas alturas, seguro que te estarás preguntando, ¿cuánto tiempo tarda en volver a la normalidad el cuerpo tras el embarazo? No te agobies, cada cuerpo es un mundo y necesita su tiempo. Los resultados tras el ejercicio también son individuales, ya que no es lo mismo una mujer que ha practicado deporte durante el embarazo o que cuenta con una buena forma física, que una mujer que jamás lo ha hecho.
Para evitar que la figura se altere notoriamente después del embarazo, os damos algunas claves para recuperar la figura después del parto. Recuerda que durante la primera semana no se debe coger ningún peso superior al del bebé:
1. Sé positiva
No comiences negativa, pensando en el temor de tu nuevo papel como mamá y en todo lo que se te viene encima. Piensa que bajar de peso ¡sí es posible! Eso sí, ten paciencia y constancia, piensa que la zona abdominal es la que más sufre durante el embarazo, de hecho, la separación de los músculos abdominales, llamada diástasis del recto, es un trastorno común. Además, los ejercicios para tonificar el abdomen son los que más lo exigen, ya que los resultados lucen a largo plazo.
2. Cuídate desde el primer día
Más vale prevenir que curar. No caigas en el tópico de «ya me cuidaré una vez haya dado a luz». Por eso no te conformes con recuperar tu silueta tras el parto y esfuérzate desde el embarazo.
El postparto es la mejor etapa para bajar los kilos que ganaste durante la gestación, pero para resultados más efectivos, el trabajo debe comenzar desde que descubres que estás embarazada. Expertos afirman que si la mujer tiene el peso adecuado al quedarse embarazada, la piel estará tonificada y los músculos se reacomodarán más fácilmente cuando el pequeño haya nacido.
3. Practica deporte a diario
Recuerda que lo recomendado durante el embarazo es subir un kilo mensualmente, porque a mayor peso, mayores posibilidades de sufrir diabetes gestacional, una enfermedad que pone en riesgo a ti y a tu bebé. Durante los 9 meses no te quedes quieta, camina, haz ejercicios aeróbicos, yoga, pilates, natación, gimnasia hipopresiva o incluso pesas, con rutinas diseñadas para mamás conseguirás recuperar la distensión abdominal y eliminar todos los líquidos retenidos en piernas y brazos.
Los primeros ejercicios, si el parto fue vaginal, deben realizarse en las primeras 24 horas después de dar a luz. Se recomienda agitar los dedos de los pies, flexionar los tobillos, empujar los pies contra el borde de la cama y girar el cuerpo de un lado para otro. Tendida sobre la espalda flexiona las rodillas y extiende una pierna y luego la otra, intentando contraer ligeramente el abdomen. A partir de las 6 semanas, los ejercicios pueden empezar con más intensidad como los abdominales. El útero se contrae y vuelve a su tamaño original 4 semanas después de dar a luz, ahora es el momento para empezar a establecer una rutina de ejercicios.
4. Cuida tu dieta
No piques entre horas, si te entra hambre las frutas y los cereales serán tus aliados. Amamantar al bebé hace que la mujer tenga un alto gasto calórico que necesariamente termina en la pérdida de peso. Verás cómo cada semana pierdes kilos. Si estás amamantando, corres un riesgo mayor de deshidratación, así que procura beber mucho líquido, de 6 a 8 vasos de agua por día. También deberías evitar las bebidas y los alimentos que contengan cafeína.
Las dietas de adelgazamiento después del parto deben ir acompañadas de ejercicio para que los resultados sean realmente efectivos. Es fundamental comenzar una dieta equilibrada que incluya frutas, verduras y cereales integrales, que aportan minerales, vitaminas, energía y pocas calorías. Te ayudarán además a mejorar el aspecto de la piel, de las estrías y aumentar las defensas.
Evita las grasas saturadas, los azúcares refinados y cuida la forma de preparar los alimentos. Cocina las carnes a la plancha y las verduras salteadas, cocidas, al vapor o crudas, y en muy pocas ocasiones rebozadas o fritas.
5. «Aprender» a respirar
Algo tan natural e instintivo como respirar requerirá de concentración después del parto. Esto se debe a que el crecimiento del útero empuja el diafragma hacia arriba, lo que hace que pierda su habilidad para descender durante la inhalación. Dado que el diafragma forma la parte superior de los músculos centrales, es importante trabajar con un fisioterapeuta, que te prescribirá ejercicios para ayudar a restablecer el funcionamiento del diafragma a su capacidad completa.
6. Descanso
Asegúrate de descansar lo suficiente. Trata de dormir cuando el bebé duerme. Esto puede ser sólo unos pocos minutos de descanso varias veces al día, pero estos minutos pueden ¡ser oro!.